Monterrey y Pachuca en el Mundial de clubes: esperanza y decepción
Con sus rivales directos aún en disputa, Monterrey mantiene la esperanza, mientras que Pachuca queda eliminado siendo una decepción en el torneo de la FIFA.
Monterrey continúa su camino con paso firme en el Mundial de Clubes. Los dirigidos por Domènec Torrent empataron 1-1 ante el Inter de Milán y posteriormente igualaron sin goles frente a River Plate. Con cuatro puntos de seis posibles, Rayados se mantienen invictos y con claras opciones de clasificar a la siguiente ronda del torneo.
La gran clave del desempeño regio ha sido su defensa. Desde el penal recibido ante el Inter, Monterrey no ha permitido más goles. Ramos ha sido el eje de una zaga que luce ordenada, y el equipo muestra un equilibrio táctico que le permite competir de tú a tú con gigantes del fútbol internacional.
Rayados tienen todo por jugar en su último encuentro, el miércoles 25 de junio frente al Urawa Reds, ya eliminados. Para avanzar, Monterrey necesita ganar y esperar que el enfrentamiento entre Inter y River de un ganador. Aunque el panorama es ajustado, la posibilidad sigue viva.
El pase a la siguiente ronda no solo significaría gloria deportiva: también implicaría un ingreso estimado de 10 millones de dólares por premios y derechos. Monterrey busca consolidar su proyecto deportivo y ganar proyección mediática en el escaparate global del Mundial de Clubes.
En contraste, Pachuca quedó eliminado tras caer 3-1 frente al Real Madrid. A pesar de haber jugado con uno menos desde la temprana expulsión de Raúl Asencio, los Tuzos ofrecieron resistencia. Sin embargo, los goles de Bellingham, Güler y Valverde sentenciaron el partido. El tanto de Elías Montiel fue un consuelo para una eliminación que deja lecciones al equipo hidalguense.
Con sus rivales directos aún en disputa, Monterrey mantiene la esperanza. El equipo llega invicto a su última cita de la fase de grupos y con una fórmula clara: ganar con contundencia y esperar resultados. Si lo logran, Rayados podría firmar una clasificación histórica y demostrar que el fútbol mexicano tiene nivel para competir en la élite internacional.
