China busca diálogo comercial con Trump en medio de tensiones arancelarias
China busca negociar con Trump bajo principios de respeto mutuo, mientras adopta medidas para contrarrestar los efectos de la guerra comercial.
China expresó su disposición a negociar con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para aliviar las crecientes tensiones comerciales entre ambos países.
Durante una rueda de prensa, He Yongqian, del Ministerio de Comercio chino, declaró: “China siempre mantiene sus puertas abiertas”, aunque enfatizó que cualquier diálogo debe estar basado en el respeto mutuo y la equidad. Advirtió que si el país asiático es atacado, responderá hasta el final.
Yongqian rechazó el uso de amenazas o chantajes como medio para llegar a acuerdos, subrayando que estas prácticas no son aceptables para China.
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“Presionar, amenazar o extorsionar no es la manera correcta de tratar con China”, afirmó el funcionario, destacando la importancia de avanzar hacia la cooperación y la convivencia pacífica.
Según Yongqian, el enfoque debe centrarse en resolver los problemas mediante el diálogo y la negociación, respetando principios de beneficio mutuo.
La disputa comercial entre ambas naciones escaló recientemente, cuando Trump aumentó los aranceles a China al 125%, en respuesta a los planes del país asiático de imponer un arancel del 84% en represalia. Este conflicto ha desencadenado una serie de medidas económicas, impactando a diversas industrias.
En este contexto, las trituradoras de soja chinas comenzaron a adquirir grandes volúmenes de soya brasileña, reduciendo drásticamente la compra del cultivo estadounidense.
Al menos 40 cargamentos han sido reservados en la última semana, lo que representa 2.4 millones de toneladas, aproximadamente un tercio del volumen mensual que China procesa. La caída de los precios brasileños impulsó estas adquisiciones, marcando un cambio significativo en las relaciones comerciales.
Brasil, que ya es el principal proveedor de soya para China, ha visto aumentar su participación en las exportaciones agrícolas al gigante asiático, mientras que Estados Unidos pierde terreno.
Este reacomodo refleja las tensiones entre las dos mayores economías del mundo y sus impactos en los mercados globales.
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