Semana de 40 horas presiona a empresas: advierte el IMCP
Muchas empresas mexicanas enfrentan desafíos estructurales por falta de capital y capacidades gerenciales para hacer cambios organizacionales complejos.
La semana de 40 horas genera presiones a la mayoría de las empresas porque no cuentan con recursos económicos necesarios, además de una reorganización interna en horarios y personal, advirtió el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).
El vicepresidente de Fiscal, Rolando Silva Briceño, apuntó que este movimiento de política laboral busca adoptar el estándar que se tiene en países como Estados Unidos para “poner un piso más parejo”.
Además, dijo que también se debe a los excesivos gastos que realizan el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Salud y Servicios Sociales de Trabajadores del Estado (ISSSTE) por la jornada laboral que ofrece un día para descansar y recuperarse del cansancio laboral.
El 75 por ciento de los trabajadores mexicanos reporta estrés laboral, ocupa el primer lugar a nivel mundial, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con la reducción de la jornada el patrón para poder mantener la misma cobertura requeriría un trabajador más… y puede entrar un nuevo tema que es la carencia de mano de obra se convierta en un tema a resolver”. Rolando Silva Briceño, Vicepresidente de Fiscal IMCP
Además, indicó que más del 50 por ciento de las fuentes de empleo se encuentran en la informalidad, y puede incrementarse por el perjuicio que puede causar para los trabajadores con prestaciones ante la nueva carga que se presenta para los empleadores que deberán buscar soluciones para no poner en riesgo la viabilidad y rentabilidad del negocio o la empresa.
Destacó que los desafíos estructurales que identifican, se presentan para un porcentaje significativo de las empresas mexicanas carecen del capital necesario para realizar las inversiones requeridas, al igual que una disparidad en las capacidades gerenciales para implementar cambios organizacionales complejos.
Las propuestas deben contribuir a una implementación equilibrada entre los derechos laborales y la sostenibilidad económica de las empresas mexicanas, concluyó Silva Briceño.
