Activistas despliegan gigante imagen de Trump con Epstein frente al Castillo de Windsor durante su visita al Reino Unido
Activistas exhiben imagen gigante de Trump con Epstein en el Castillo de Windsor durante su visita al Reino Unido, desatando protestas masivas en Londres.
La visita oficial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al Reino Unido desató protestas multitudinarias y una polémica instalación visual: activistas del grupo Everyone Hates Elon desplegaron una pancarta de más de 400 metros cuadrados con una fotografía de Trump junto al fallecido magnate Jeffrey Epstein, acusado de tráfico sexual de menores, en las inmediaciones del Castillo de Windsor.
Una protesta que sacudió la llegada de Trump
La gigantesca imagen, visible desde gran distancia, fue financiada mediante una campaña de recaudación colectiva que reunió más de 30 mil libras esterlinas (alrededor de 40 mil dólares). Los organizadores bautizaron la acción como “Arruina la visita de Trump al Reino Unido con esta foto de Epstein”, y señalaron que su objetivo era recordar los vínculos pasados entre Trump y Epstein, quien murió en prisión en 2019 mientras enfrentaba cargos por delitos sexuales.
Además de la pancarta, el colectivo Led By Donkeys proyectó la imagen de Trump y Epstein sobre las murallas del Castillo de Windsor, provocando que la policía desplegara un fuerte operativo de seguridad en la zona y posteriormente detuviera a cuatro personas por “comunicaciones maliciosas”.
Manifestaciones masivas en Londres contra Trump
Simultáneamente, miles de manifestantes salieron a las calles de Londres para expresar su rechazo a la visita de Estado. La coalición Stop Trump, junto a decenas de colectivos sociales, organizó marchas que avanzaron por el centro de la capital portando pancartas con lemas anti-Trump y banderas palestinas.
“Es repugnante que lo reciban con honores pese a su respaldo a Israel y sus políticas discriminatorias”, dijo Rihanna Williams, cineasta de 26 años, quien participó en las protestas. Por su parte, Ella Reilly, de 23 años, aseguró que “los líderes mundiales cometen atrocidades que afectan a muchas personas ignoradas, y es necesario visibilizarlas”.
La acción artística y las protestas generaron un intenso debate en redes sociales y atrajeron la atención de medios británicos y estadounidenses. Mientras simpatizantes de Trump calificaron la instalación como una “provocación ofensiva”, los organizadores defendieron su derecho a la protesta pacífica y afirmaron que “la memoria y la rendición de cuentas importan, especialmente cuando se trata de figuras públicas con poder”.
El episodio marcó el inicio de una visita rodeada de tensiones diplomáticas y alto despliegue de seguridad, que continuará en los próximos días con encuentros oficiales entre Trump y el gobierno británico.
Te puede interesar
Polémica en el Castillo de Windsor: proyectan imágenes de Trump y Jeffrey Epstein