Congreso de EE. UU. aprueba proyecto que impone impuesto del 3.5% a las remesas
Este nuevo gravamen representa una reducción frente al impuesto original propuesto, que establecía un 5 por ciento.

La Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos aprobó este jueves 22 de mayo un controvertido proyecto de ley que impone un impuesto del 3.5% a las remesas enviadas fuera del país, una medida que forma parte de una ambiciosa legislación fiscal impulsada por el presidente Donald Trump.
Este nuevo gravamen representa una reducción frente al impuesto original propuesto, que establecía un 5 por ciento. El nuevo porcentaje será aplicado a los residentes extranjeros que envíen remesas a sus países de origen.
La legislación, que también contempla amplios recortes fiscales y presupuestarios, fue aprobada por un estrecho margen de 215 votos a favor y 214 en contra, luego de intensas negociaciones nocturnas entre congresistas republicanos y la Casa Blanca. Trump calificó el plan como “el gran y hermoso proyecto de ley”.
Ahora el megaproyecto pasa al Senado, donde la mayoría republicana prevé debatirlo con celeridad, con la meta de enviarlo al Despacho Oval antes del 4 de julio, Día de la Independencia de Estados Unidos.
Entre sus disposiciones más destacadas, el proyecto extiende las exenciones fiscales implementadas por Trump durante su primer mandato y agrega nuevas deducciones, como exenciones para propinas y pagos en la compra de automóviles fabricados en Estados Unidos.
También contempla un aumento en los fondos destinados al control fronterizo y la aplicación de la política migratoria del actual mandatario, así como restricciones a los programas de asistencia alimentaria, Medicaid y Medicare, aspectos que generaron fuertes divisiones dentro del propio Partido Republicano.
Además, el texto estipula un incremento en el límite de exenciones a impuestos estatales y locales, otro punto de fricción entre los legisladores.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés), una entidad independiente, la implementación de esta ley podría sumar 2.4 billones de dólares a la deuda nacional en los próximos diez años, que actualmente supera los 36 billones.
Para compensar este incremento, la legislación propone recortar más de un billón de dólares en programas de seguridad social durante la próxima década. De ese monto, cerca de 500 mil millones corresponderían a reducciones en Medicare.
La CBO estima que, de aprobarse, alrededor de 8.7 millones de personas perderían su cobertura médica del Medicaid. Esta propuesta ha sido especialmente criticada por los sectores moderados del Partido Republicano, preocupados por el impacto que los recortes tendrían en sus distritos.
Trump y el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, han defendido la iniciativa argumentando que las restricciones buscan eliminar el acceso de inmigrantes indocumentados a estos programas.
Las discrepancias entre el ala conservadora —que exigía recortes más inmediatos— y el sector centrista del partido casi detienen la votación. La tensión llevó a Trump a reunirse personalmente con los legisladores reacios en la Casa Blanca durante la tarde del miércoles. Horas después, los votos necesarios fueron asegurados.
Gobierno de México está en contra del impuesto
Uno de los puntos más polémicos es el impuesto a las remesas, que ha generado críticas a nivel internacional. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, condenó la medida, calificándola como “una injusticia” y “discriminatoria”, por su impacto directo en los migrantes mexicanos en Estados Unidos.
Y añadió hoy en su conferencia; «Vamos a seguir hablando con los senadores y demócratas explicando porque no es bueno que haya un impuesto a las remesas y seguir trabajando sobre este tema en particular con México porque hay un convenio que no debe cobrarse dos veces».
Además reconoció la reducción de impuesto a remesas y señaló que su objetivo es que no haya ningún impuesto.
El plan también incluye recortes a programas de energía limpia promovidos por la administración del expresidente Joe Biden, así como aumentos de impuestos para instituciones educativas.