EE.UU. extenderá ataques de “mar a tierra” contra el narcotráfico
El gobierno estadounidense sostiene que busca interrumpir las rutas marítimas y terrestres del narcotráfico.
El senador Lindsey Graham reveló que el presidente Donald Trump planea informar al Congreso de Estados Unidos sobre una posible expansión de las operaciones militares contra organizaciones vinculadas al narcotráfico en Venezuela y Colombia, que incluiría el paso de ataques marítimos a acciones terrestres.
Desde septiembre de 2025, Washington ha intensificado las operaciones navales en el Caribe y el Pacífico con el objetivo de frenar el tráfico de drogas hacia su territorio.
Hasta ahora se han reportado varios ataques a embarcaciones sospechosas, algunos con víctimas mortales en las tripulaciones.
Graham afirmó que Trump le comunicó personalmente la intención de revisar una “opción terrestre”, y que próximamente se llevará a cabo una sesión informativa ante el Congreso sobre esta posible expansión. “Habrá una sesión informativa… sobre la expansión de mar a tierra”, aseguró el senador republicano.
El gobierno estadounidense sostiene que busca interrumpir las rutas marítimas y terrestres del narcotráfico que abastecen el mercado interno.
Algunos legisladores, entre ellos Graham, consideran que los grupos delictivos operan como “narco-terroristas”, por lo que justifican la acción militar como una medida de defensa nacional.
Sin embargo, analistas internacionales advierten que una intervención de este tipo podría desatar una grave crisis diplomática, además de generar debates legales sobre la soberanía de las naciones afectadas y los límites del uso de la fuerza en el extranjero.
Los gobiernos de Venezuela y Colombia han manifestado su rechazo categórico a cualquier acción militar estadounidense dentro de sus fronteras, señalando que representaría una violación del derecho internacional.
El posible cambio de enfoque —de patrullas marítimas a intervenciones en tierra— eleva el riesgo de un choque geopolítico en América Latina. Expertos alertan que este movimiento podría tensar aún más las relaciones entre Washington y Caracas, y poner a Bogotá en una posición diplomática complicada.
¿Qué sigue ahora?
- El presidente Trump deberá presentar los detalles de la estrategia ante los líderes del Congreso estadounidense.
- Se definirán los objetivos terrestres, ubicación y condiciones jurídicas de las operaciones.
- Venezuela, Colombia y otros países latinoamericanos podrían responder con acciones diplomáticas o reforzamiento militar.
- La comunidad internacional, especialmente la ONU y la OEA, analizará las implicaciones regionales y legales de una eventual expansión militar.
De concretarse, esta nueva etapa marcaría un precedente sin igual en la política antidrogas de EE.UU., al trasladar su ofensiva del mar al territorio continental sudamericano, con consecuencias imprevisibles para la estabilidad política y la seguridad regional.

