Fundación Distribuidores Nissan impulsa la educación en México
La Fundación Distribuidores Nissan mejora la infraestructura escolar y brinda nuevas oportunidades educativas en comunidades del país.
La Fundación Distribuidores Nissan celebra 25 años de trabajo constante en favor de la educación en México. Su misión se centra en mejorar la infraestructura escolar y ofrecer a los niños espacios dignos para aprender, crecer y construir su futuro.
Desde sus inicios, la fundación ha enfocado sus esfuerzos en la construcción, reconstrucción y equipamiento de escuelas primarias públicas. Gracias a este compromiso, más de 120 planteles en 29 estados del país ya forman parte de su legado educativo, señala Anabel Ramírez Bravo, gerente General de Fundación Distribuidores Nissan.
El objetivo principal de la Fundación Distribuidores Nissan es crear entornos seguros y funcionales para el aprendizaje. Cada escuela representa una oportunidad para que más niños accedan a la educación sin recorrer largas distancias ni enfrentar condiciones precarias.
“Cuando un niño estudia en un espacio limpio, ventilado y bien iluminado, se siente motivado y feliz”, explica Ramírez Bravo. “Queremos que cada alumno disfrute su escuela y que los padres confíen en que sus hijos están en un lugar seguro y digno», añade.
El impacto educativo trasciende los muros. La fundación entrega uniformes, útiles escolares y mobiliario adaptado a las edades de los alumnos, fortaleciendo el sentido de pertenencia y orgullo en las comunidades donde opera.
La Fundación Distribuidores Nissan trabaja de manera conjunta con la Secretaría de Educación Pública y con autoridades estatales y municipales. Este trabajo colaborativo garantiza que cada escuela se integre adecuadamente a los sistemas educativos locales.
Este año, la organización inaugurará su escuela número 125 en Navojoa, Sonora, un logro que reafirma su compromiso nacional. Además, mantiene presencia en casi todo el territorio mexicano, con excepción de Zacatecas, Ciudad de México y Baja California Sur, donde busca expandirse próximamente.
Durante 2025, la fundación planea construir cinco nuevos planteles en Sonora, Puebla, Tabasco y Oaxaca, además de seis proyectos de reconstrucción en el Estado de México y Tamaulipas. En total, 11 obras nuevas marcarán su agenda de trabajo antes de cerrar el año, explica Ramírez Bravo.
Cada inauguración representa un motivo de orgullo para los distribuidores Nissan que impulsan este esfuerzo. En cada escuela nueva, decenas de familias hacen fila para inscribir a sus hijos, entusiasmadas por acceder a una educación más cercana y de mejor calidad.
Para la fundación, educar significa agradecer. Nació del deseo de los distribuidores Nissan por devolver a las comunidades el apoyo recibido a lo largo de los años. Este espíritu de gratitud impulsa cada proyecto, cada aula y cada sonrisa infantil que florece en los nuevos espacios.
Después de 25 años, la Fundación Distribuidores Nissan se consolida como un ejemplo de compromiso social en México, destaca Ramírez Bravo. Su labor demuestra que cuando el sector privado apuesta por la educación, el país avanza hacia un futuro más equitativo, con niños motivados, comunidades unidas y escuelas que transforman vidas.
