Alzheimer precoz: síntomas, causas y cómo detectarlo antes de los 65 años
El Alzheimer precoz puede aparecer antes de los 65 años. Conocé los síntomas, factores genéticos y cómo detectar esta forma poco común de demencia a tiempo.
Aunque muchas veces se la asocia con personas mayores, la enfermedad de Alzheimer también puede afectar a adultos jóvenes. En estos casos, se la conoce como Alzheimer de inicio temprano o precoz, y representa un desafío tanto para el diagnóstico como para el tratamiento.
¿Qué es el Alzheimer de inicio temprano?
El Alzheimer de inicio temprano es una forma poco frecuente de demencia que se manifiesta antes de los 65 años. De acuerdo con la Clínica Mayo, aproximadamente 110 de cada 100.000 adultos entre los 30 y los 64 años padecen esta variante. En contraste, 1 de cada 9 personas mayores de 65 años tiene Alzheimer, lo que demuestra lo inusual de su aparición precoz.
El doctor Lisandro Olmos (MN 89837), especialista en rehabilitación neurológica y director de Rehab Center, explicó que alrededor del 5 al 6 % de las personas con Alzheimer presentan síntomas antes de los 65 años. En una nota previa con Infobae, señaló: “Es un tipo de demencia muy poco frecuente que afecta a personas menores de 65 años”.
Factores de riesgo y genética
Según los expertos de la Clínica Mayo, uno de los factores de riesgo más relevantes es el antecedente familiar. “Tener el padre, la madre o un abuelo o abuela con Alzheimer de aparición temprana aumenta el riesgo de tener la enfermedad. Sin embargo, tener antecedentes familiares no significa que necesariamente desarrollarás la enfermedad”, aclaró la entidad.
La misma fuente detalló que el 11 % de las personas con Alzheimer precoz son portadoras de una mutación genética causal, aunque en el total de casos de Alzheimer, menos del 1 % presenta estos genes.
En casos con antecedentes familiares, se recomienda realizar pruebas genéticas para anticiparse a la aparición de síntomas y facilitar la planificación familiar.
El doctor Olmos también destacó la existencia de mutaciones heredables en tres genes específicos —APP, PSEN1 y PSEN2— que pueden estar involucrados en algunos casos.
Dificultades en el diagnóstico
Uno de los grandes retos del Alzheimer precoz es su diagnóstico. La Fundación Pasqual Maragall de Barcelona advierte que, por su baja frecuencia, puede ser un proceso largo y complicado. Además, los síntomas iniciales pueden confundirse con estrés u otras condiciones.
Olmos indicó que el síntoma más frecuente en la mayoría de los casos es la pérdida de memoria, aunque también pueden presentarse otras señales menos típicas como:
- Trastornos del lenguaje
- Dificultad en cálculos o pensamiento analítico
- Problemas en la toma de decisiones
Estas alteraciones pueden impactar directamente en la vida laboral y social del paciente.
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Síntomas según Johns Hopkins Medicine
Entre los primeros síntomas más comunes del Alzheimer de inicio temprano se incluyen:
- Olvidos frecuentes, especialmente de información reciente.
- Dificultad para resolver tareas básicas o seguir recetas.
- Desorientación respecto al tiempo o lugar.
- Problemas visuales y de percepción
- Dificultad para comunicarse o encontrar palabras.
- Cambios de humor y conducta
- Aislamiento social y laboral
Los síntomas más avanzados pueden incluir:
- Confusión profunda
- Sospechas infundadas hacia el entorno.
- Dificultades graves para hablar, tragar o caminar.
- Pérdida severa de la memoria
Diagnóstico y tratamiento
El doctor Olmos remarcó la importancia de descartar otras enfermedades que también afectan la memoria, como los accidentes cerebrovasculares (ACV). Un diagnóstico médico completo es esencial para diseñar un tratamiento adecuado.
“Es necesario consultar al neurólogo cuando se perciba algún deterioro en las capacidades intelectuales, sobre todo si hay impacto en la actividad laboral”, señaló Olmos. “Allí es cuando deben explorarse múltiples posibilidades diagnósticas, entre ellas, el Alzheimer precoz”.
¿Existe una cura?
Actualmente, no existe una cura para esta enfermedad. Sin embargo, profesionales de la salud como los de Johns Hopkins Medicine han logrado ayudar a pacientes a mantener su función mental y controlar los síntomas.
El tratamiento puede incluir:
- Medicamentos para preservar funciones cognitivas
- Actividad física regular
- Control de enfermedades cardiovasculares y diabetes
- Suplementos antioxidantes
- Entrenamiento cognitivo
Conclusión
El Alzheimer de inicio temprano es una realidad poco conocida, pero que requiere atención, diagnóstico temprano y acompañamiento integral. Consultar con especialistas ante los primeros síntomas puede marcar una diferencia crucial en la calidad de vida del paciente y su entorno.