Ortodoncia sin complicaciones: cómo elegir la pasta dental que puede transformar tu sonrisa
Los dientes con brackets pueden acumular hasta tres veces más placa bacteriana que los que no tienen ortodoncia, si no se utiliza una pasta dental adecuada.
Usar brackets o retenedores no solo transforma tu sonrisa: transforma toda tu rutina de cuidado. Si antes bastaba con cepillarte al despertar y antes de dormir, durante un tratamiento de ortodoncia cada paso cuenta. En esta etapa, elegir la pasta dental adecuada se convierte en una de las decisiones más importantes para mantener una boca sana y evitar complicaciones que pueden ir mucho más allá de lo estético.
Quienes usan brackets saben que el cepillado se vuelve todo un arte. Los pequeños espacios entre los alambres y las piezas metálicas se convierten en refugios perfectos para restos de comida y bacterias.
De acuerdo con los especialistas, las personas con aparatos fijos son más propensas a desarrollar gingivitis, mal aliento y desmineralización del esmalte si no mantienen una higiene rigurosa. De hecho, estudios clínicos muestran que el 80% de los pacientes con ortodoncia presentan inflamación leve en las encías durante los primeros meses, principalmente por el uso de pastas que no logran llegar a las zonas más difíciles.
Las pastas tradicionales suelen enfocarse en el aliento fresco o el blanqueamiento, pero durante un tratamiento de ortodoncia, lo prioritario es proteger y fortalecer. La fricción de los brackets, los ajustes mensuales y los cambios en la mordida pueden irritar las encías y debilitar el esmalte. Además, el pH de la saliva cambia ligeramente, creando un ambiente más propenso a la acumulación de bacterias y placa.
Es así como la fórmula de Dentobac® marca la diferencia; ya que está diseñada para cuidar la salud bucal desde la raíz, combinando la Vitamina E con sus propiedades regenerativas y calmantes, con la Clorhexidina que es un antiséptico clínico de amplio espectro, el Calcio que refuerza el esmalte, y extractos naturales de Olea Europea y Menta Inglesa que no solo refrescan, sino que aportan un efecto antiinflamatorio y purificante; dando como resultado una protección completa para dientes, encías y tejidos blandos.
La mayoría de las personas cree que, una vez retirados los brackets, la etapa más difícil terminó. Pero el uso de retenedores (ya sean fijos o removibles) también requiere atención especial, ya que los retenedores pueden acumular bacterias en la superficie interna del material plástico, lo que provoca mal olor, manchas e incluso infecciones leves si no se limpian adecuadamente.
Usar una pasta como Dentobac®, con propiedades antisépticas y antiinflamatorias, ayuda a mantener no solo los dientes, sino también el aparato libre de bacterias. Hoy, el cuidado bucal es parte del bienestar integral. Porque detrás de cada sonrisa alineada y cada selfie frente al espejo, hay constancia, paciencia y los productos correctos.


