El estado de Jalisco se presentó como la sede más mexicana de la Copa Mundial de Fútbol de 2026, gracias a su riqueza cultural —mariachi, tequila, charrería— y a una estrategia de trabajo que viene desde hace años, indicó el gobernador Pablo Lemus Navarro.
Como parte de la campaña de promoción, se nombraron embajadores destacados de Jalisco: la clavadista olímpica Ale Orozco y los exfutbolistas Carlos Salcido, Ramón Morales y Fernando Quirarte, con lo que se busca combinar identidad local, deporte y proyección internacional.
En materia turística y de infraestructura, Jalisco espera recibir entre 2.5 y 3 millones de visitantes, incrementando su flujo habitual, y para ello se ha invertido más de 12 mil millones de pesos en obras como ampliaciones viales, mejoras al aeropuerto y transporte público.
También se anunció un programa de eventos gratuitos y conciertos con grandes nombres como Maná, Carlos Santana y Alejandro Fernández, así como el uso del centro histórico de Guadalajara como sede de un festival de fans (FIFA Fan Festival) durante los 39 días del Mundial.
En el ámbito de seguridad, el gobierno estatal está instalando un sistema de inteligencia y monitoreo avanzado —con inversión de alrededor de 6 mil millones de pesos— y coordina con los gobiernos de Estados Unidos de América y Canadá para garantizar que el evento se desarrolle con tranquilidad.
Finalmente, destacaron que todas las mejoras —infraestructura, turismo, cultura, seguridad— no solo buscan que la Copa Mundial sea un éxito, sino que deje un “legado” para los jaliscienses, posicionando al estado —junto a la ciudad de Guadalajara— como un destino de clase mundial.
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