A un año del Mundial 2026: México se alista con entusiasmo, inversión… y varios desafíos

Faltan exactamente 365 días para que comience el Mundial de Futbol 2026, y México ya vive la emoción de ser nuevamente protagonista de la máxima fiesta del deporte. Esta será la tercera vez en la historia que el país albergue una Copa del Mundo, ahora como sede compartida con Estados Unidos y Canadá, en lo que promete ser el torneo más ambicioso y diverso de todos los tiempos.

El partido inaugural se disputará en el Estadio Azteca, convirtiendo a este recinto en el primero en albergar tres inauguraciones mundialistas (1970, 1986 y 2026). Pero más allá del simbolismo deportivo, el evento representa un gran reto logístico, económico y social que México debe enfrentar con planeación y compromiso.

Una derrama millonaria para el país

Especialistas estiman que México podría recibir una derrama económica cercana a los 3 mil millones de dólares gracias al turismo, el comercio, la hotelería, el transporte y los servicios asociados al evento. Se proyecta que más de cinco millones de visitantes nacionales y extranjeros transiten por las ciudades sede: Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey.

El evento generará oportunidades para pequeñas y medianas empresas, promoverá el empleo temporal y posicionará al país como destino turístico de talla internacional. La ocupación hotelera, los servicios de movilidad, las plataformas de alojamiento y la gastronomía local serán grandes beneficiados.

Estadio Azteca y otras sedes en remodelación

El legendario Estadio Azteca está siendo renovado para cumplir con los estándares FIFA: se amplía la capacidad, se mejora el sistema de iluminación, se instalan nuevos accesos, espacios de prensa y zonas VIP. En Guadalajara, el Estadio Akron también recibe mejoras en su sistema de césped, audio y conectividad. Monterrey, con su moderno Estadio BBVA, está prácticamente listo, requiriendo solo ajustes técnicos menores.

No obstante, expertos advierten que las obras deben acelerarse, pues los plazos son ajustados y se requiere garantizar estándares de accesibilidad, seguridad y sostenibilidad ambiental.

Transporte, seguridad y servicios: asignaturas pendientes

Uno de los mayores retos para México será garantizar una infraestructura urbana eficiente. En la Ciudad de México, se están invirtiendo recursos en ampliar líneas del Metro, modernizar estaciones del Metrobús, mejorar vialidades y reforzar la conectividad con el Aeropuerto Internacional.

También se prevé la instalación de miles de cámaras de videovigilancia adicionales, módulos de atención turística y capacitación para cuerpos policiales en zonas de alto flujo. Sin embargo, persisten preocupaciones sobre el estado de las calles aledañas al Estadio Azteca, la capacidad del transporte público en días de partido y la seguridad en áreas turísticas.

Voces desde el gobierno y la sociedad

La presidenta de la República, junto con autoridades deportivas y locales, ha reiterado que el Mundial será un “evento de Estado”, por lo que se trabajará de manera coordinada entre los tres niveles de gobierno. A su vez, organizaciones civiles han solicitado que las inversiones se traduzcan en beneficios duraderos para las comunidades, no solo en obras de corto plazo.

También han surgido llamados a garantizar condiciones laborales justas para quienes trabajan en las obras y servicios relacionados con el torneo, evitando prácticas de explotación o precariedad.

La Selección Mexicana y la ilusión del “quinto partido”

En lo deportivo, la Selección Mexicana ya inició su proceso de preparación con nuevos talentos, amistosos internacionales y el objetivo claro de romper con la llamada “maldición del cuarto partido” y hacer historia ante su gente.

El Mundial 2026 será el primero con 48 selecciones participantes, lo que significa más partidos, más aficionados, y más exposición para el país anfitrión.

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