Economía mundial se enfriará en 2026, advierte la OCDE
La OCDE anticipa que el crecimiento global perderá fuerza en 2026 por el encarecimiento financiero, la debilidad del comercio y la persistencia de riesgos geopolíticos.
La economía mundial entrará en una fase de menor dinamismo en 2026, de acuerdo con las nuevas proyecciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). El organismo anticipa que el crecimiento global perderá impulso frente a un entorno marcado por altas tasas de interés, comercio debilitado y riesgos geopolíticos persistentes.
Según el reporte, aunque la inflación continuará reduciéndose en la mayoría de las economías avanzadas —permitiendo eventualmente cierta flexibilización en la política monetaria— la actividad productiva no mostrará una recuperación sólida. Los mercados laborales seguirán ajustándose y la inversión permanecerá contenida.
La OCDE advierte que las condiciones financieras restrictivas seguirán frenando la actividad, especialmente en sectores sensibles a las tasas de interés como la vivienda y el consumo durable. Además, el comercio internacional enfrenta un crecimiento modesto ante la fragmentación geoeconómica y la desaceleración de las principales economías importadoras.
El organismo señala que la incertidumbre sigue siendo elevada. Factores como tensiones geopolíticas, conflictos regionales, volatilidad en los precios de la energía y vulnerabilidades en mercados emergentes podrían profundizar la desaceleración.
Aun así, la OCDE considera que la economía global evitará una recesión generalizada. En cambio, transitará hacia un periodo de crecimiento débil y ajustes graduales, en el que la política fiscal y la coordinación internacional serán claves para sostener la estabilidad.
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